23/12/09

QUIEN DIJO AYER..

No hay nadie como ella...Tan Dulce Tan bella...


Cuando Dios me dejo de compañera la soledad, fue quizas la mejor decicion que el ha tomado sobre mi, porque fue gracias a ella que conoci la verdadera yo, gracias a ella descubri mi escencia, gracias a ella etendi muchas cosas y gracias ella soy feliz, porque gracias a la Soledad es que me acompañe de personas maravillosas y como olvidarlas si han sido ellas las que han sido Luz, seguramente evocaria a Maná con su cancion "Bendita tu Luz... "


En este caso traigo a mi mente a Rosana diciendo :-"Te debo este sueño", Cuando pienso en la persona mas original, sincera y divertia que pude conocer: VICTORIA..



Victoria con esa Juventud que lleva en toda ella me hizo entender que la vida es un regalo maravilloso y que asi como un regalo es tambien una necesidad: necesidad de crecer, de pensar, de conocer, de madurar y de ser feliz. Seguramente lo más gracioso es todo lo que tuvo que hacer para que yo de una vez por todas madurara.. comprobe que soy un proyecto a largo plazo..."lento pero seguro", esos inumerables regaños, los momentos que compartimos con el fin de ser compañia, las tardes tenian más risas que de costumbre -incluso para fastidiar al de musica :P-, cada pregunta, cada actitud son recuerdos y reflexiones que no cambio por nada... (ni siquiera por mi viaje a paris)


Victoria en medio de esa espontaneidad a la que yo particularmente llamaria locura es la persona mas dulce que ahi en mi vida, con cada palabra o quizas silencio uno se encuentra con un ser real, en medio de la dulzura de ella yo me encontre con un abrazo y un te quiero sincero.

Y es que..Qué se le puede pedir a la Vida cuando ya te dio una amistad tan hermosa?, mas bien a Dios gracias por la sonrisa calida y las palabras honestas de Victoria en la constante belleza de su ser.



una Musa para Arjona.. !!


Te pido perdon por meterte en algun problema, por no hacer las cosas bien, te pido perdon por las veces que falle, perdon por tantas molestias, pero gracias por tu paciencia, tu tiempo, tu escucha, tu constancia y sobre todo por ser la persona que no espere conocer y la amiga que es un lujo tener...



Ahora que quizas nuestras vidas mas separadas estaran, te recuerdo que yo te llevo en el alma porque como diria Platón aunque el cuerpo cambie el alma es la esencia del ser y es esta inmutable, y como es inmutable hay te llevo para nunca olvidarte...


Mi Vicky te quiero tantisimo, cuenta conmigo siempre y cuando digo siempre me refiero a que no me vayas olvidar, soy una persona con un miedo, el de la extincion de la memoria humana y espero que no vaya a ser mi recuerdo parte de esa extincion..

Aqui te escribo con la sensiblidad que cargo, con la delicadeza de mis sentimientos, con la honestidad de mi gratitud y mi felicidad de llamarte AMIGA..Ja! sonrio cuando lo hago..gracias por darme ese derecho



QUE LA COINCIDENCIA NO SEA UNA EXCUSA PARA ENCONTRARNOS O HABLARNOS. MAS BIEN QUE SEA LA AMISTAD LA EXCUSA PAR ACOMPAÑARNOS


UN ABRAZO GRANDE, UN BESO ..Y QUE DIOS TE BENDIGA...


psta: chanfle, nunca tuve la delicadeza de preguntarte tu color favorito, como para escribir esta entrada con ese color ¬¬... esa era la idea...









22/12/09

Haz de tus sueños realidades, y haz de tu realidad algo digno del mejor de tus sueños.


Realmente existen pocos lugares en los que poder refugiarse. Puedes resguardarte del frío en una pequeña cueva horadada en la roca, acurrucar tus rodillas junto a tu pecho, quedarte cerca de la luz de la noche con miedo a inspeccionar qué hay más allá de la barrera de la oscuridad, sentir el frío en la nuca, y ver tu aliento desvanecerse con cada respiración entre los rugidos del viento y los árboles.

También está la opción de apagar el mundo bajo una manta. Atravesar el pasillo con fuertes, sonoras e hirientes pisadas que lloran cada cual más fuerte que la anterior, cruzar el umbral de tu habitación y olvidarte del mundo con un sonoro portazo. Secar tus lágrimas en la soledad del calor y la oscuridad de nuestro corazón que sin saber cómo se ha apoderado de todo lo que nos rodea.

Te puedes refugiar en las palabras. Se cruzan y entrelazan unas con otras y crean el perfecto escondite en el que dar la espalda al mundo que te ha defraudado, un escondite que no sabe de límites de tiempo y lugar, que juega con la imaginación a no encontrar el fin. Un refugio que se convierte en prisión de la que resulta difícil salir, ya que nadie quiere abandonar un lugar en el que tus deseos se hacen realidad en la piel de los demás

Hallarás cobijo igualmente en la Luna. Ella nos mira continuamente y su mirada no sabe de envidias, rencores ni odio, su luz es el brillo que le falta a nuestro corazón y su manto de estrellas es el calor que le han robado a nuestra piel. Y nosotros sólo podemos querer hacerla más y más grande hasta que sea su rostro lo único que nos importe, y es que su presencia cada noche nos hace creer de nuevo que todo es posible.

¿Dónde nos escondemos cuando el mundo se desmorona a nuestro alrededor? Podemos correr a refugiarnos en nuestra cueva preferida y no hacer caso de la ventisca que crece fuera, podemos recordar viejos tiempos encerrándonos bajo una manta, podemos acudir a los libros y la poesía, o podemos asomarnos al balcón y contarle nuestros problemas a la Luna.

Pero... en la cueva la oscuridad puede llegar a sobrecogernos y lo que hay en el fondo de ella puede salir para hacernos añorar nuestros pequeños problemas y querer escapar de ese lugar en el que miramos al terror directamente a los ojos. El calor que nos proporciona nuestra manta se apaga con el tiempo, cuando nuestro cuerpo se adapta a su compañía volvemos a sentir el frío y la fuerza de los knocks knocks de la puerta nos hace temer su derribo. Las historias de los libros no nos pertenecen, ni nos pertenecerán nunca, pues son de aquellos que las crearon, son sus sentimientos, sus vidas, y su compañía se apaga en la última página, cuando cerramos su poder y volvemos a recordar nuestros problemas. Y la Luna... no brilla todas las noches, cuando no crece, mengua, y tras refulgir en todo su esplendor nos recuerda con una ladeada sonrisa que se va apagar aunque nosotros sigamos allí.

Las cuevas son demasiado profundas, las puertas pueden derribarse, los libros se pueden quemar, y la Luna se puedTamaño de fuentee hacer Nueva para nosotros.

No nos queda adonde ir y el mundo sigue desmoronándose.

Es entonces cuando soñamos. Un libro en la habitación del fondo de una cueva iluminada por la Luna, el poder infinito, el fuego que Prometeo robó para nosotros. Los sueños. El lugar al que acudir cuando nuestro derredor se cae por su propio peso, el escondite que no conoce límites, fronteras, horizontes, anocheceres o tormentas. El mundo que nos permite crear tantos mundos como deseemos aunque se desmoronen una y otra vez. Los sueños son la receta que nos permite vivir tan realmente que, abrumados por su poder, nos hacen llorar, sonreir, imaginar, desear...

Pero aún así... despertamos, porque los sueños, sueños son.

De la cueva volvíamos con las manos vacías, la puerta de nuestro cuarto la abríamos con la cabeza gacha, el libro se quedaba en el estante y nos destrozaba el corazón, y de la Luna regresábamos más oscuros de lo que nos fuimos.

Más de los sueños regresamos con una estrella bajo el brazo. Con un deseo, con un fin, con un objetivo, con una ilusión... El hombre no es hombre sin soñar, ya que sin sueños no hay quien nos haga avanzar. La estrella que traemos no es más que un simple papel, con una pequeña inscripción capaz de hacernos afrontar el mundo que se desmorona:

Haz de tus sueños realidades, y haz de tu realidad algo digno del mejor de tus sueños

MIEDO

El miedo el que nos deja paralizados como estatuas mientras el tiempo corre. El miedo. Sólo él. Nos impide dar el paso, saltar y sentirnos libres. El miedo con sus múltiples caretas. El miedo en forma de comodidad. El miedo vestido de indiferencia. El miedo.


Si te alejas es por miedo. Si callo es por miedo. Él nos obliga a estancarnos, a cerrar las puertas a cal y canto, a quedarnos en el mismo lugar y no querer avanzar. Él nos llena la boca de excusas y justificaciones, de explicaciones que ni nosotros mismos creemos.


Y le hacemos caso. Como si fuera un dictador disfrazado que nos llena la mente de buenos propósitos con técnicas de propaganda envolvente. Nos indica qué hacer, dónde, cómo y porqué. No dudamos de él porque pensamos que la razón es otra. ¡Qué manipulador!


Sólo cuando seamos conscientes de que el miedo es lo que nos impide ser libres, la senda hacia nuestro propósito estará más clara. Las malas hiervas se apartarán. Nuestra leyenda personal se escribirá con mejor letra.



Tengo miedo que se rompa la esperanza

Que la libertad se quede sin alas

Tengo miedo que haya un día sin mañana

Tengo miedo de que el miedo, te eché un pulso y pueda más

No te rindas no te sientes a esperar